Una de las cosas buenas de cumplir años es que acabas por entender que la vida son dos dias, como aquel que dice, y que hay que vivirla y saborearla con toda intensidad, porque hay situaciones que no volveran jamás y si no las has disfrutado antes, puede que ya no puedas hacerlo.
A veces son inevitables ciertas rutinas, pero es imperdonable que dejemos que nuestra vida transcurra en una continua y monótona rutina , y no hagamos nada por cambiar.
Bonitas reflexiones.
Un beso, Lo_la